En Kannabia Seed Company nos tomamos muy en serio el trabajo de combinación de variedades para obtener versiones
autoflorecientes de nuestras mejores semillas de marihuana. En este caso trabajamos con la nueva Dream Sherbet Auto
que acabamos de incorporar a nuestro catálogo. Sabíamos de antemano que el resultado iba a ser generoso y fuerte,
pero no tanto. A nosotros mismos nos ha dejado pasmados.

Probablemente el éxito de la operación haya residido en el empleo de una Ruderalis de primera calidad para no
contaminar las propiedades de la semilla de marihuana feminizada original. Si habéis visto nuestra presentación de
la Dream Sherbet, con genética west coast de Pink Panties, se trata de una indica indiscutible, con propiedades
liberadoras.

En su versión de semilla de marihuana autofloreciente la potencia se desboca, subiendo sus niveles de thc y sus
capacidades resinosas. Mantiene su densidad, de forma aún más comprimida, cumpliendo las dos máximas de una buena
planta de marihuana automática: alta producción, corta floración.

Cultivo

La versión autofloreciente de la Dream Sherbet es igualmente fosforescente con intensos tonos de color y tricomas
pegajosos. En altura se comprime para no sobrepasar nunca el metro de altura, es realmente muy coqueta en interior.

Puedes trabajarla en interior con un Sea of Green bien tupido y recoger 500 gramos por metro cuadrado o, si te va la
guerra, alista tus plantas en una Guerrilla de exterior y hazlas llegar al metro veinte de altura buscando un lugar
bien luminoso, para ver como la producción marca 200 gramos por planta aproximadamente.

En interior el proceso completo de cultivo de la Dream Sherbet Auto se fija en 75 días, y en exterior te va a
agradecer que la cultives a partir de marzo para llegar a su cénit a finales de septiembre, pero asegurándote que
las temperaturas nocturnas no bajen demasiado, pues el frío influiría en su correcto desarrollo.

Sabor y efecto

Con respecto a su origen feminizada, la Dream Sherbet Auto conserva su sabor dulce y terroso, pero enfatiza un poco
más el carácter afrutado que tenía la Sherbet inicial, brotando el aroma a melón y mango. Riquísima.

En cuanto al efecto, más vale que te vayan los viajes en indica. El THC se concentra hasta en un 22% en esta planta
de marihuana autofloreciente, dando un impacto relajante duradero y profundo. Pocas plantas automáticas son tan
agudas y perceptibles.

Ficha Técnica